Ayer comenzó la 60° Cumbre del Mercosur, el primer encuentro presencial tras dos años de pandemia, con una agenda vinculada principalmente a temas de relacionamiento externo y atravesada por las tensiones entre los países miembros.
Las relaciones internas del bloque no pasan por su mejor momento. El presidente de Brasil Jair Bolsonaro no viajó a Paraguay para participar de las reuniones. A su vez, la decisión de Lacalle Pou de negociar aisladamente un acuerdo de libre comercio con China fue criticada por el Canciller argentino que remarcó la necesidad de alcanzar el consenso de todos los miembros para este tipo de medidas.
En el frente externo, se confirmaron dos medidas que se venían trabajando en los últimos años:
- Por un lado, se decidió la baja del arancel externo común en un io% de forma transversal (es decir, productos que tenían io°70 de arancel, ahora tendrán 9%). Brasil ya se había adelantado a esta medida y había reducido unilateralmente sus aranceles en mayo. Si bien aún no se difundieron los documentos de esta decisión, trascendió que incluirá un conjunto de excepciones:
a) los productos que tienen 2% de arancel pasarán a tener o%,
b) aquellos que se encuentran entre 16% y 35% se reducirán solo a voluntad de los estados parte, y
c) quedarán excluidos de la reducción para todos los socios los sectores automotor, tejidos, confecciones, calzados, juguetes, lácteos y duraznos enlatados. En la tabla debajo se presentan estimaciones propias del porcentaje de posiciones arancelarias afectadas a cada decisión.
- Por otro lado, se anunció la conclusión de las negociaciones del acuerdo de libre comercio con Singapur, el primer acuerdo desde los de la Unión Europea y el EFTA (que aún no se han ratificado).
Fuente: Instituto de Estrategia Internacional de la CERA
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