En 2021 la crisis de los contenedores llevó al valor del flete internacional a valores nunca vistos. A partir de 2022 comenzó una tendencia a la baja en el costo del transporte que continúa en el comienzo de 2023. Así lo refleja el índice Freightos Baltic de transporte global de contenedores que marcó USD 1.568 el último viernes, un valor que no se observaba desde la pre pandemia, disminuyendo 21,8% respecto a lo registrado sólo un mes atrás. Adicionalmente, disminuyó significativamente el tiempo de demora para la carga y descarga.

Dos de las principales navieras (AP Moller-Maersk y Mediterranean Shipping) anunciaron que tienen sin operar a un tercio de su capacidad de transporte entre Asia y Estados Unidos y un 2o% entre Asia y Europa por el menor flujo de bienes entre esos destinos. Por su parte, MSC anunció que devolverá 6o embarcaciones (8,5% de su flota) y desechará las unidades más antiguas para reemplazarla por nuevas embarcaciones que se sumarán los próximos 3 años.

Parte de este menor flujo se explica por la menor demanda en un contexto de políticas monetarias restrictivas, con las empresas buscando reducir sus elevados inventarios antes de apelar a mayores importaciones. Por este motivo, ahora los dadores de carga son quienes tienen mayor poder de negociación sobre las navieras que compiten por conseguir clientes bajando sus tarifas.

Fuente: Instituto e Estrategia Internacional  de la CERA

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